Qi Gong - Dan Tian Una técnica milenaria contra el deterioro físico Fácil, Entretenido, Terapéutico, AutoMasaje, Rehabilitación, Caminata _______________________________________________________________ El Qi Gong - Dan Tian, un arte corporal milenario que, progresivamente, ha demostrado sus beneficios para prevenir y curar numerosas enfermedades. Algunas, incluso, a las que la medicina occidental aún se enfrenta con dificultad. El Qi Gong - Dan Tian, es una gimnasia energética que favorece la salud y la longevidad. Esta técnica fomenta los secretos y la eficacia de este ejercicio de bajo impacto, que se adapta a cualquier edad, que ayuda a incrementar la longevidad y que, además, contribuye a la rehabilitación de las degeneraciones neurológicas como el Parkinson y el Alzheimer.Se trata de una disciplina energética milenaria, con más de 5.000 años de bagaje, que forma parte de la Medicina Tradicional China, junto con la Acupuntura – una técnica que consiste en clavar agujas en puntos determinados del cuerpo –, la Moxibustión –una terapia que se basa en aplicar calor y así estimular zonas específicas –, el Tui Na –una modalidad terapéutica del masaje chino–, la Dietética y la Farmacopea – un libro en el que se recogen las sustancias medicinales más comunes, así como el modo de prepararlas y combinarlas. El Qi Gong – Dan Tian, que significa dominio de la energía, se fundamenta en un conocimiento del hombre y de su interacción con la naturaleza. Este antiguo arte corporal utiliza movimientos lentos como la respiración y la concentración, para estimular la energía y favorecer el buen funcionamiento de los órganos internos. “Esta técnica permite descubrir el mundo interior de cada uno y, al mismo tiempo, contactar con su esencia y así reequilibrar y armonizar la propia energía”. Esta disciplina se creó para mantener un buen estado de salud y más tarde se adaptó como herramienta terapéutica, y rehabilitación por su comprobada utilidad. Su práctica se basa en tres principios básicos: la regulación o control del Sheng – cuerpo físico–; del Qi –energía o soplo– y del Shen –espíritu–. Técnicas de Qi Gong Dan Tian - Según los expertos en Qi Gong, es preferible practicar esta técnica a primera hora de la mañana y al aire libre. El Qi Gong se puede practicar mediante posturas estáticas “con las que se refuerzan los potenciales humanos al aumentar las capacidades que dormitan en el interior”. También se realizan movimientos dinámicos y armoniosos como una especie de danza a cámara lenta, que confieren flexibilidad, refuerzan la musculatura y activan la circulación. La tercera manera de practicar esta disciplina se desarrolla en posición sentada y se puede efectuar al borde de una silla, sobre un almohadón o en postura de sastre, es decir, con las piernas cruzadas. En estas condiciones de inmovilidad y comodidad, el trabajo principal recae sobre la concentración. Se pretende potenciar la energía vital y ponerla en circulación de manera voluntaria y consciente. Estos ejercicios representan una excelente preparación para la meditación taoísta y budista. Por otra parte, el silencio o pronunciar en voz alta determinados sonidos originales de esta práctica, proporciona propiedades terapéuticas diferentes y específicas para curar cada uno de los cinco órganos de la Medicina China: el hígado, el corazón, el bazo, el pulmón y el riñón. También los automasaje despiertan la energía corporal y ayudan a prevenir el envejecimiento, sobre todo, de los órganos sensoriales. Los fundamentos de la actividad Qi Gong consisten en controlar y fortalecer la energía. Y para logar que ésta fluya, el usuario debe moverse lentamente, respirar de manera sincronizada con el movimiento y concentrarse para activar y condensar el Qi en esa zona. Beneficios terapéuticos del Qi Gong. Según los expertos, el Qi Gong contribuye a la rehabilitación de personas con Parkinson o Alzheimer. Practicar esta disciplina de forma regular ofrece múltiples ventajas que van, desde la prevención de enfermedades y el mantenimiento de la salud, hasta la optimización de algunas patologías como, por ejemplo, la miopía, la bronquitis crónica, el asma, las alergias, la fibromialgia, la esterilidad o la diabetes. No obstante, a pesar de que la ciencia aún no ha podido determinar todos los beneficios que aporta, diversos estudios médicos han demostrado que el Qi Gong regula los sistemas orgánicos, posibilita el funcionamiento armonioso de los mismos y genera resistencia ante las infecciones. Respecto al sistema nervioso, contribuye a regular el equilibrio excitación/ inhibición. A las personas que sufren neurastenias – un cansancio inexplicable que aparece después de realizar un esfuerzo intelectual –, les ayuda a relajarse y a recuperar el ritmo de sueño. Asimismo, influye directamente en la circulación sanguínea y en el corazón y existen diversos métodos para regular y corregir la presión arterial, que si se asocian con otras técnicas terapéuticas, sirven como tratamiento de la hipertensión y de la arteriosclerosis. Los ejercicios de Qi Gong afectan positivamente al aparato digestivo, ya que facilitan los movimientos gastrointestinales y la secreción de jugos gástricos y, por tanto, se refuerza el sistema inmunológico. También acelera el metabolismo, al estimular la segregación de las glándulas hormonales y ayuda en la regulación del peso y en la salud emocional. Para los que practican profesiones curativas (médicos, acupuntores, osteópatas, masajistas, etc.), esta técnica les otorga una mayor sensibilidad a la hora de atender a sus pacientes. En cuanto al cáncer, el Qi Gong se emplea como indicación complementaria de los métodos clásicos, “fortalece el estado general de salud, se opone a la depresión y permite tolerar mejor los tratamientos, en particular, la quimioterapia”. El entrenamiento de este arte corporal les permite a las personas mayores prolongar su autonomía y reforzar el equilibrio. Asimismo, juega un papel importante en este colectivo sobre la flexibilidad, la coordinación, la atención, la concentración, la memoria y actúa como antidepresivo. De hecho, en Francia se encuentran los avances médicos más importantes de esta disciplina en los centros de mayores y en los que asisten a las personas afectadas de cáncer. Qi Gong – Dan Tian para todos. A pesar de que la ciencia aún no ha determinado todos los beneficios que aporta el Qi Gong, diversos estudios médicos han demostrado que esta disciplina regula los sistemas orgánicos. La práctica del Qi Gong “no provoca efectos secundarios si se sabe aplicar bien la técnica y si no se fuerza”. Se puede ejercer en cualquier parte pero lo ideal sería ponerla en práctica en plena naturaleza para captar las energías de la misma. Aunque no existen condiciones especiales para un ejercicio eficaz, es preferible realizarlo por la mañana con el estómago vacío. En cualquier caso, se debe crear un estado de calma en el cuerpo, en la respiración y en el espíritu. Además, se recomienda sonreír ligeramente durante la práctica. El programa de actividades se adapta a la persona, por tanto, lo puede practicar todo el mundo. Si se mantiene una buena salud, se escogerán una serie de ejercicios generales, en cambio, si se está enfermo, se podrá elegir otros movimientos más específicos. Estas aplicaciones concretas incluyen estiramientos, movimientos lentos y automasajes que se adaptan en función de un diagnóstico, ya sea de la medicina occidental o de la china. En los últimos años, el Qi Gong ha sido tema de múltiples investigaciones en China, Japón, Australia y Estados Unidos. De ahí, que sus funciones terapéuticas resulten cada vez más precisas. Aplicaciones del Qi Gong. El Qi Gong, aplicado a la empresa, ayuda a optimizar el rendimiento laboral. Médicas y terapéuticas: En este ámbito puede ser muy útil gracias a la sensibilización que produce en las manos y con la que se consigue una mejor acción en acupuntura, masajes y osteopatía. También en el aprendizaje de ejercicios terapéuticos en los casos de enfermedades cardiovasculares, degenerativas, insomnio, diabetes, parálisis, deficiencia inmunitaria, asma o hipercolesterolemia. En el deporte: Un deportista que lo practica controla sus movimientos técnicos y visualiza más intensamente sus resultados. En determinados ejercicios se consigue una fortaleza especial como en las pruebas de fondo o para los esfuerzos cortos pero intensos como el juego de equipo. En las empresas: Puesto que el Qi Gong favorece el equilibrio físico y emocional, ayuda a optimizar el rendimiento laboral. Su práctica regular, por lo menos una vez al día, disminuye el tiempo de sueño de una a tres horas por la noche, tiene efectos desfatigantes inmediatos, produce una acción tonificante a largo plazo y aumenta la resistencia al esfuerzo físico e intelectual. Para el crecimiento personal: Resulta un medio eficaz para modular la respuesta emocional y afrontar las situaciones de tensión psicoemocional. De esta manera, permite una mejor comprensión y adecuación al medio y a la relación con los demás. Los estudios científicos que se han llevado a cabo en China, tanto en niños como en adultos, demuestran la acción favorable del Qi Gong en la memoria, en los esfuerzos intelectuales, en la imaginación y en la creatividad. Para el desarrollo espiritual: El Qi Gong se ha inspirado en la práctica de monjes budistas y taoístas que se ha desarrollado durante milenios y constituye una vía real para transformar, mediante el aliento, la energía vital que se sitúa en el centro del cuerpo (dos o tres dedos por debajo del ombligo).